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El pasado lunes, los primeros 33 estudiantes comenzaron las clases en la tercera escuela de Orihuela Costa. Pronto se les unirán otros 200 niños, aunque persisten las preocupaciones por la falta de transporte escolar y la escasez de personal docente.
UN ANUNCIO DE ÚLTIMA HORA
La Escuela Número 20 de Orihuela, la tercera escuela en la costa, abrió sus puertas bajo un manto de incertidumbre. Los padres solo recibieron notificaciones por correo electrónico el viernes por la tarde, informándoles que sus hijos asistirían a clases en unidades prefabricadas—también conocidas como barracones—comenzando la próxima semana.
Los padres también han quedado a oscuras respecto a la disponibilidad de un comedor y si se proporcionará transporte escolar.
Por ahora, la matrícula de estudiantes se está llevando a cabo en fases. Los primeros 33 estudiantes, desde 1º hasta 3º de primaria, han comenzado las clases en unidades equipadas con sus respectivos maestros, según el Departamento de Educación.
Los estudiantes restantes, desde educación infantil (3 años) hasta 6º de primaria, se espera que comiencen el jueves, lo que incrementará el número total de estudiantes a 226. A estos estudiantes también se les proporcionará transporte escolar.
Se han anunciado puestos docentes, y el nuevo personal comenzará el miércoles. Sin embargo, los obstáculos administrativos han retrasado la contratación, ya que cada puesto requiere la aprobación tanto del Director de Educación como del Departamento de Hacienda.
El objetivo es establecer seis clases de educación infantil y doce clases de primaria, además de nombrar un equipo directivo para supervisar el centro. Según las autoridades educativas, todos los procesos se están llevando a cabo dentro de los plazos administrativos estándar.
UNA IMPLEMENTACIÓN GRADUAL
Se espera que la escuela esté completamente operativa la próxima semana—al menos para su primera fase. Alcanzará su capacidad total solo el próximo año académico, ya que los estudiantes seguirán matriculándose a lo largo del año. Para septiembre, la escuela tiene como objetivo acoger a los 450 estudiantes de las edades infantil y primaria.
Ubicada en la calle Níspero en Los Dolses, la instalación consta de 18 aulas prefabricadas distribuidas en dos plantas, con un tamaño de clases que varía de 20 a 25 estudiantes. Los espacios adicionales incluyen una sala de pedagogía terapéutica, una sala de desarrollo lingüístico, una biblioteca, un salón de profesores y oficinas para el equipo directivo.
Sin embargo, 250 estudiantes que actualmente estudian en una escuela en la calle Nicolás de Bussi tendrán que trasladarse a esta nueva instalación a mitad del año escolar, en lugar de comenzar desde cero en septiembre.
“Parece como si hubieran cambiado de país dos veces en un solo año escolar”, comentó un padre preocupado, destacando los desafíos que enfrentan los estudiantes que ya se han mudado desde el extranjero.
SOBREPOBLACIÓN EN LAS ESCUELAS EXISTENTES
Mientras tanto, las dos escuelas públicas existentes en la costa enfrentan una grave sobrepoblación. Ambas han agotado su espacio disponible, lo que ha dado lugar a algunas de las relaciones más altas de estudiantes por maestro en la Comunidad Valenciana, solo comparables con las de Torrevieja.
CEIP Los Dolses, diseñada para 400 estudiantes, albergó a 710 durante el año académico 2023-2024. CEIP Playas de Orihuela, con una capacidad similar, alcanzó los 795 estudiantes.
A pesar de contar con una parcela de 20.000 metros cuadrados disponible para la expansión, Los Dolses lleva siete años esperando instalaciones adicionales.
Ambas escuelas han tenido que sacrificar espacios comunes para crear aulas adicionales y necesitan recursos extra para acomodar a los numerosos estudiantes que llegan con conocimientos limitados o nulos de español.
A largo plazo, la Escuela Número 20 está prevista para ser reconstruida como una estructura permanente. El Ayuntamiento ha asignado una parcela de 11.139 metros cuadrados en la calle Limonero, en el desarrollo de La Cuerda, para este fin.
DESCONTENTO EN LA COMUNIDAD EDUCATIVA
La apertura de la escuela ha generado tensiones entre el Ayuntamiento, el gobierno regional y las instituciones educativas locales. La semana pasada, miembros de la comunidad educativa de Orihuela Costa expresaron sentirse engañados y traicionados.
Durante una reunión del consejo escolar, se enteraron de que la tan esperada tercera escuela no era una instalación independiente, sino simplemente una extensión del CEIP Playas de Orihuela, ubicada a cinco kilómetros.
Lejos de aliviar la crisis de sobrepoblación, la recién inaugurada “Aulario Nº 20 del CEIP Playas de Orihuela” ha aumentado la carga administrativa del CEIP Playas de Orihuela.
Los representantes de la escuela han expresado su preocupación por la falta de personal administrativo adicional y profesores especializados en materias clave como inglés, música y educación física.
“Esto refleja una alarmante falta de planificación y compromiso por parte de las autoridades”, dijeron los miembros de la comunidad educativa.
Las familias de Orihuela Costa en Acción (FOCA) también han criticado la falta de compromiso de las autoridades educativas, exigiendo medidas urgentes para garantizar una infraestructura y recursos adecuados para los estudiantes.
FOCA ha programado una manifestación para el 22 de marzo a las 12:00, que comenzará en la calle Nicolás de Bussi y terminará en el Ayuntamiento local en Playa Flamenca.
DELAYOS Y DESAFÍOS ADMINISTRATIVOS
Aunque la construcción se completó en diciembre, los preparativos e instalaciones de equipos retrasaron la apertura de la escuela, que inicialmente estaba programada para enero.
El proyecto en sí ha sufrido múltiples retrasos desde su aprobación en 2022. Originalmente, las clases debían comenzar en 2023, luego en septiembre de 2023, antes de ser retrasadas nuevamente.
En abril de 2023, el Ministerio asignó 1,2 millones de euros para la construcción de las aulas prefabricadas.
Sin embargo, los continuos retrasos llevaron a una creciente frustración dentro de la comunidad educativa, culminando en protestas el pasado junio e incluso en la dimisión masiva de la junta escolar del CEIP Playas de Orihuela.