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El defensor del Sevilla, Kike Salas, un internacional español sub-21, está siendo investigado por presuntamente recibir tarjetas amarillas de forma deliberada en partidos de la temporada pasada como parte de un fraude de apuestas. Si es condenado, el jugador de 21 años se enfrenta a una pena de prisión de entre seis meses y tres años.
La policía española está investigando una serie de incidentes sospechosos de las últimas semanas de la temporada 2023/24, cuando el Sevilla tenía poco en juego. Las autoridades sospechan que Salas cometió faltas intencionadamente para beneficiar a cómplices que apostaban por sus tarjetas amarillas.
La investigación se centra en las siete tarjetas amarillas que Salas recibió en los últimos nueve partidos de la temporada, lo que representa la mayoría de sus diez tarjetas en total esa temporada. La sospecha aumenta debido al momento en que se produjeron algunas de las tarjetas: una en el minuto 88 y dos más en el minuto 94. Los investigadores creen que estas tarjetas tardías fueron deliberadas, permitiendo que al menos dos cómplices pudieran beneficiarse de las apuestas realizadas sobre tales ocurrencias.
Salas, quien se unió a la academia juvenil del Sevilla a los 11 años y ha jugado 54 partidos con el club, ha negado cualquier irregularidad. Ha representado a España a nivel sub-21, con dos partidos, y en diciembre de 2024, extendió su contrato con el Sevilla hasta 2029. Sin embargo, las acusaciones han echado una sombra sobre su carrera y podrían implicar a otros jugadores, ya que las autoridades españolas no han descartado una posible participación más amplia.
El jugador renovó recientemente su contrato con el club por una cantidad que se estima en 360,000 euros al año.
Las acusaciones son similares a las que se presentaron contra el centrocampista del West Ham, Lucas Paquetá, quien también está siendo investigado por presuntas violaciones de las normas de apuestas. A Paquetá se le acusa de haber recibido intencionadamente tarjetas amarillas en partidos de la Premier League contra Leicester City, Aston Villa, Leeds United y Bournemouth entre noviembre de 2022 y agosto de 2023. A pesar de que una de las apuestas solo era de 7 libras, la FA ha adoptado una postura estricta, pidiendo una sanción de por vida para el brasileño.
La FA ya ha mostrado previamente una política de tolerancia cero hacia las violaciones de las normas de apuestas, especialmente al suspender al delantero del Brentford, Ivan Toney, durante ocho meses después de que infringiera las reglas de apuestas. El organismo rector tiene como objetivo mantener la integridad del deporte, y estos casos sirven como ejemplos mediáticos de las graves consecuencias a las que se enfrentan los jugadores si se ven involucrados en infracciones relacionadas con las apuestas.